El Poder Judicial dictó 20 años y seis meses de prisión para el expresidente Alejandro Toledo, convirtiéndolo en el primer exmandatario peruano condenado en el marco del caso Lava Jato. Toledo fue hallado culpable de colusión agravada y lavado de activos por recibir millonarios sobornos para favorecer a la constructora Odebrecht en la adjudicación de tramos de la carretera Interoceánica.
La procuradora Ad Hoc del caso Lava Jato, Silvana Carrión, destacó que esta sentencia marca un precedente importante en la lucha contra la corrupción en el país. Según Carrión, Toledo defraudó al Estado al recibir más de 35 millones de dólares en sobornos, afectando la credibilidad en las instituciones públicas y resaltando la importancia de castigar de manera ejemplar a quienes cometen estos delitos.
El abogado de Toledo anunció que apelarán la sentencia, mientras que la procuradora reconoció el esfuerzo de la Fiscalía y el equipo especial que trabajaron durante más de cinco años para recopilar las pruebas necesarias para llegar a este veredicto.