Una testigo clave del trágico accidente entre una cúster de la línea ‘Anconero’ y un bus del Metropolitano afirmó que el conductor ya había advertido sobre desperfectos técnicos antes del choque. Según su relato, el chofer comentó que “fallaba algo” en el vehículo mientras circulaban por el paradero Caquetá, ubicado a poco más de 2 kilómetros de la estación Dos de Mayo, lugar del impacto. La cúster terminó invadiendo el carril exclusivo y provocó la muerte de tres personas, además de dejar más de 25 heridos.
El vehículo siniestrado, de placa A9H-785 y perteneciente a la empresa Nueva Estrella, acumulaba más de S/35.000 en multas por diversas infracciones desde el 2018. A pesar de ese historial, seguía circulando con autorización vigente, revisión técnica y SOAT, según informó Pavel Flores, vocero de la ATU. Este hecho ha generado indignación y cuestionamientos sobre el control real del transporte informal en la capital.
La testigo aseguró que pensó en bajarse cuando escuchó al conductor mencionar el fallo, lo que agrava aún más la responsabilidad del chofer. “Me dije: algo va a pasar”, recordó. La investigación continúa, mientras los familiares de las víctimas exigen justicia por lo que califican como una tragedia evitable.